Estas
últimas semanas les he compartido recomendaciones de algunos de mis escritores
mexicanos favoritos: José Emilio Pacheco, Sor Juana Inés de la Cruz, Jorge
Ibargüengoitia y finalmente Luis Spota.
Luis
Spota, hijo de un inmigrante italiano, fue un escritor nacido en la Ciudad de
México, el 13 de julio de 1925 y fallecido el 20 de enero de 1985. Fue una
persona autodidacta y sumamente versátil, desempeñándose como comentarista
radiofónico, conductor de TV, periodista, jefe de redacción y colaborador de
una revista, director y guionista de cine y además escritor.
Leer
a Luis Spota es sumergirse al mundo de la política, las pasiones, la
corrupción, la ética, los problemas sociales, el trabajo en el Gobierno, etc.
Las
grandes aguas, escrita en 1954, retrata la vida del
Ingeniero Rivas, su trabajo en la construcción de una presa, la satisfacción
que siente de trabajar para el Gobierno sirviendo a su país, así como sus dilemas
en torno a su familia.
Esta
novela muestra al lector, el contexto en el que se desarrollan estos hombres y
sus desafíos al construir la presa: Estar en una situación de riesgo, lejos de
las comodidades y abiertos a tentaciones de todo tipo. De la misma manera, la
familia de estos trabajadores, que sufre al vivir en condiciones adversas y en
este caso, la esposa del Ingeniero Rivas, que desea más lujos y comodidades,
independientemente del trabajo que desempeñe su marido. Definitivamente hace
reflexionar al lector, sobre las personas que son una influencia muy fuerte en
los trabajadores, por ejemplo, esas esposas ambiciosas a quienes no les importa
qué medio utilicen sus maridos para brindarles un nivel de vida repleto de
comodidades y lujos. Para Rivas, el trabajo lo es todo y está tan comprometido
con su causa que eso generará mucho drama en su vida. Las grandes aguas fue
ganadora del Premio Ciudad de México e incluso Carlos Sotomayor se baso en ella
para lanzar una telenovela del mismo nombre, en 1989. Es una historia llena de
dilemas, sacrificios, pasiones y provocará que el lector se clave en el libro
de principio a fin.
Este
escritor también tiene otras obras con temas interesantes, como Las
horas violentas, escrita en 1958 y que envuelve la crónica de una
huelga, de la vida de un sindicato, drama y asuntos sociales.
En Lo
de antes, escrita en 1968, un ladrón que quería reivindicarse y es
asediado por la policía corrupta. En esta novela, Arturo Ripstein se basó para
su película Cadena Perpetua.
Vagabunda, una de sus primeras novelas, escrita en 1950, contiene algunas cuestiones eróticas y sirvió de inspiración para la película Flor de sangre, la hermosa vagabunda y los hombres que enloquecen por ella hasta matarse.
Vagabunda, una de sus primeras novelas, escrita en 1950, contiene algunas cuestiones eróticas y sirvió de inspiración para la película Flor de sangre, la hermosa vagabunda y los hombres que enloquecen por ella hasta matarse.
En
El
tiempo de la ira, escrita en 1960, un militar se rebela contra un
dictador. Y para estas fechas, a muchos lectores llamará su atención La
plaza, publicada en 1971 y que relata los acontecimientos del
movimiento estudiantil del 2 de octubre de 1968, utilizando protagonistas expuestos
y sin censura.
En
resumen, Luis Spota realmente fue un escritor genial que abordó temas polémicos
y su forma de escribir atrapa al lector de principio a fin.
En
cada una de sus publicaciones, sale una leyenda que llamó mucho mi atención:
Escrito por Luis Spota confirma que la narrativa del autor
es una presencia necesaria; que varios de sus textos gozan de buena salud; y
que va bien utilizar la memoria como una provocación contra la amnesia que
patrocina el poder.
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