Esta película francesa de drama, amor, misterio, aventura y con toques surrealistas, está nominada al Óscar en la categoría de animación. Se centra en Naoufel, un joven sin rumbo que se enamora de una joven, y a la par, sigue el trayecto de una mano que busca el resto de su cuerpo en las calles de París (remite al personaje de "Dedos" de Locos Addams).
Está ambientada en los 80, cuando Naoufel aún era niño y disfrutaba de escuchar sus cassettes y usar una grabadora para registrar momentos importantes, y también en la década de los 2000 cuando ya existía el DVD. Los personajes se muestran muy melancólicos y refugiados en el placer de la música.
El guión es genial. Está basado en la novela Happy Hand de Guillaume Laurant y dirigida por el parisino Jérémy Clapin.
Numerosas películas animadas están centradas en el público infantil, repletas de diálogos y personajes histriónicos, pero esta, sin duda, va para una audiencia mayor. Tiene una gran animación, poco diálogo, introspectiva y que vale la pena verla. Está en Netflix.
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