Ir al contenido principal

CREADORES DE HITS


En Creadores de Hits: La popularidad en la era de la distracción, Derek Thompson, un joven periodista estadounidense, escritor en The Atlantic, se dispuso a hacer un análisis profundo sobre casos de éxito en diversos rubros: arte, literatura, tecnología, música, cine, y más, de la cultura pop, no solamente de este siglo, sino también numerosos del pasado y algunos del XIX, como la canción de cuna de Brahms, por ejemplo, que ha pasado de generación en generación.

El libro no pretende imponer una fórmula, sino se dedica a analizar lo que le funcionó a cada persona o empresa para crear un producto popular y considera la historia detrás de la creación de dicho producto, el contexto en el que se creó e incluso, en algunos casos, la explicación científica que pudo contribuir en cada uno de ellos. De igual manera, toma en cuenta que para adquirir esa popularidad, no necesariamente el éxito fue inmediato, ya que hubo obstáculos en el camino, mucha perseverancia y acontecimientos inesperados. Menciona casos interesantes como el de George Lucas y su deseo por adquirir la serie de los Thunderbirds, y al no ser exitoso, terminó por crear algo propio inspirado en eso, STAR WARS, de la que no hace falta mencionar la grandiosa fama en la actualidad y desde entonces. Planeaba una cosa y al final les inspiró crear otra. También destaca la interesante historia detrás de la saga de la británica E.L. James, qué obra fue su influencia y cómo fue adquiriendo popularidad. Por supuesto, el fenómeno de las redes sociales y su relevancia (particularmente de Facebook) no podían estar fuera de esta investigación.

Hoy en día no se trata solo de buscar la originalidad o la novedad de algún modo. También se puede mejorar un producto en el contexto adecuado y con las estrategias precisas, como las que hicieron en su momento un ejecutivo de Disney al tener la idea de poner el rostro de Mickey en los productos, y la directora comercial de la app de Tinder, quien después pasó a crear una app llamada Bumble.

Habrá a quien le funcione y a quien no, no hay fórmulas, solo acciones que pueden experimentarse e inspiración que puede hallarse en otros productos, y sin duda el "boca en boca", la etnografía y la familiaridad que encuentre el consumidor con el producto. Y por qué no, también un golpe de suerte.

En fin, son diversos los ejemplos en el libro y no quisiera mencionar más para darle la oportunidad al lector de sumergirse en cada uno de ellos, a manera de datos curiosos para aprender más, o de inspiración para rubros de creatividad o mercadotecnia. O simplemente entretenerse y sorprenderse.










Comentarios