Para cerrar el mes de Marzo, en el que se celebró el Día Internacional de la Mujer, centraré mi atención en una mujer destacada en la literatura del siglo XX: Marguerite Antoinette Jeanne Marie Ghislaine Cleeneweck de Crayencour, mejor conocida como Marguerite Yourcenar, siendo Yourcenar un anagrama de Crayencour, su apellido original. Matthieu Galey, periodista de la revista francesa L´Express, escribió el libro Con los ojos abiertos luego de conversar con ella y cuestionarla sobre diversos temas relacionados con su infancia, familia, educación, influencias, sus obras, el racismo, el feminismo, la soledad, la política, entre otros.
Marguerite
nació en Bélgica en 1903, pero se nacionalizó francesa y murió siendo ciudadana
estadounidense en 1987. Su madre falleció diez días después de que ella nació,
así que se crió con su padre y sus empleados domésticos con quienes convivió
intensamente y fueron fundamentales en su vida.
En
su entrevista con Matthieu Galey, profundiza en su papel como escritora y el
manejo de ciertos temas en sus historias. Ella sostenía que “cada pensamiento
que hace nacer un libro, arrastra consigo toda una serie de circunstancias,
todo un cúmulo de emociones y de ideas que nunca será igual en otro libro, y
cada vez el método es diferente”
De
igual manera aseguraba que “hay que impregnarse por completo de un tema hasta
que salga de la tierra, como una planta cuidadosamente regada”. Esto quiere
decir que los mejores resultados al escribir, se dan cuando uno se empapa de un
tema y enseguida llega la inspiración de escribir sobre el mismo. La vida misma
continuamente nos brinda motivos para escribir, personas que son fuente de
nuestra inspiración y sucesos de la vida diaria dignos de plasmarse en un
papel.
Es
muy interesante conocer su visión sobre la vida, su opinión y el análisis de
cada una de sus obras. Por ejemplo, Eurídice la consideró un fracaso y
demuestra que no siempre un escritor va a sentir fascinación absoluta por todos
sus escritos. De hecho, para escribir esta obra, se inspiró en un momento de la
vida de su padre, en el que tenía intención de casarse con una mujer y
finalmente no fue correspondido.
Alexis fue su primera novela, publicada en 1929, en la que abordó
el tema de un homosexual que le confiesa a su esposa sus verdaderas
preferencias sexuales. Esta obra tal vez fue una plataforma para que Marguerite
aceptara su bisexualidad.
Marguerite
Yourcenar partió hacia Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial. Vivió
en Nueva York y después en Mount Desert
Island ubicada en la costa de Maine. Su visita a la villa Adriana, en
Italia, fue su punto de partida para escribir Memorias de Adriano,
publicada en 1951 y convirtiéndose en su obra más reconocida. En el capítulo “Una
maleta y un emperador” de Con los ojos abiertos, Yourcenar se
sumerge en su experiencia mientras escribía esta obra. Adriano fue un emperador
romano innovador, austero, sobrio, con una pasión por la caza y un gusto por
las fronteras y los climas bárbaros. Era muy diferente de sus antecesores,
Augusto y Julio César. En Memorias de Adriano, Marguerite
coloca al personaje reflexionando sobre su vida a manera de monólogo.
Vale
la pena leer Con los ojos abiertos ya que es un libro muy completo que
instruye al lector sobre la vida de Marguerite Yourcenar y da una idea de la
temática de sus obras más representativas. Por otra parte, el hecho de que
Matthieu Galley haya publicado este libro a manera de conversación con la
escritora, le da dinamismo y oportunidad al lector para leer cada capítulo en
el orden que desee, dependiendo del humor y la temática en la que quiera
profundizar en ese instante.
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