La noche de los Premios Oscar estuvo llena de grandes sorpresas. Primero que nada, el milagro de que por fin Leonardo DiCaprio se haya llevado el Oscar, acontecimiento que causó tanto revuelo que hasta hubo quienes se fueron a celebrarlo al Ángel. Iñárritu volvió a llevarse la estatuilla como Mejor Director, ahora por EL RENACIDO. El año pasado fue EL ACONTECIMIENTO, pero este año la reacción general fue como un “meh, ya me lo esperaba, ya se lo había ganado, el importante esta año era DiCaprio”, que ni mexicano es y que tal vez ni le importe que lo hayan ido a festejar en México, por mucho que alguna vez en la vida se haya puesto la playera del Santos. En fin, respetable para quienes lo hayan celebrado, más por haber sido un milagro-impulsado también por las televisoras y medios de comunicación-que porque realmente se lo haya merecido. La realidad es que Leonardo DiCaprio es un gran actor y lo mostró desde su primera cinta nominada ¿A QUIÉN AMA GILBERT GRAPE?, y simplemente, por ...
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