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THE REVENANT





Alejandro G. Iñárritu nos sorprende nuevamente. No bastó que el año pasado se llevara las estatuillas de Mejor Dirección, Mejor Guión Original y Mejor Película por Birdman, sino este año también su más reciente cinta El Renacido (The Revenant, 2015) está nominada a 12 premios de la Academia: Mejor Película, Mejor Dirección, Mejor Actor, Mejor Actor de Reparto, Mejor Fotografía, Mejor Edición, Mejor Diseño de Producción, Mejor Diseño de Vestuario, Mejor Maquillaje, Mejor Mezcla de Sonido, Mejor Edición de Sonido y Mejores Efectos Visuales.


EL RENACIDO tiene una trama completamente distinta a la de películas anteriores. Se trata de una historia sobre supervivencia, en donde un grupo de hombres embarcan hacia una expedición a las montañas alejadas del oeste de Canadá, y pelean con indígenas canadienses por las pieles y el territorio. Glass, el protagonista de esta historia, tiene un hijo producto de una relación con una indígena, quien es discriminado por la tripulación. El peligro y la aventura continúan, cuando Glass es atacado por un oso grizzly y abandonado a sus cuestas para sobrevivir pese al frío y a las heridas. Es un personaje invencible, resiliente, que sigue adelante pese a la soledad y a las adversidades que se le presentan.

En esta ocasión, Iñárritu se valió del talento de Leonardo DiCaprio para el protagonista de esta emocionante historia, basada en la novela del estadounidense Michael Punke, quien es profesor, diputado y abogado, además de ser escritor.

El resultado del director mexicano, es una película de drama y aventura con una producción sorprendente, una fotografía magnífica- producto del impecable trabajo de Emmanuel Lubezki- y que además mantiene el suspenso, aunque en ocasiones es predecible, demasiado larga y un tanto inverosímil en algunas escenas. Aun así, se espera que se lleve más de un óscar y que uno de ellos sea para Leo DiCaprio, sería un gran acontecimiento.

Fue inevitable recordar a películas como:

Naúfrago (Cast Away, 2000) por los momentos de introspección y la soledad del personaje, con la diferencia de que Chuck tenía al balón Wilson y Glass solamente a sí mismo y a sus recuerdos.
La Vida de Pi (Life of Pi, 2013), por la necesidad de supervivencia en soledad y de lidiar con animales salvajes.
Gladiador (Gladiator, 2000), por ser el héroe de la historia y por los recuerdos y apariciones con su familia.



Este texto de mi autoría también fue publicado en: 
https://www.facebook.com/pelifanatica

Comentarios

Chupeflash dijo…
Si todo sale bien, será la gran triunfadora en la próxima entrega del Oscar.