Hoy se cumplen 37 años sin John Lennon, uno de los miembros de los Beatles, que luego de pertenecer a esta agrupación, se lanzó como solista y fue activista al lado de su esposa Yoko-Ono.
Su asesinato el 8 de diciembre de 1980 por un psicópata llamado Mark David Chapman, afuera del edificio Dakota en Nueva York, dejó conmocionada a la industria de la música y a todos sus fans, cuando pasadas las 11 de la noche pasó a ser parte de la inmortalidad.
Lennon ha sido inspiración para el cine, cuando en 2009, la británica Sam Taylor-Johnson dirigió una película llamada NOWHERE BOY, protagonizada por su esposo Aaron Taylor-Johnson, quien protagonizó la película y a quien recordamos por su papel principal en las cintas de KICK-ASS.
Nowhere Boy, de 2009, es un retrato de los primeros años de John Lennon, de 1944 a 1960, periodo en el que ya mostraba su gran rebeldía y que incluye tanto el plano familiar, su relación con su madre Julia y su tía Mimi, así como sus inicios en la música y cuando conoció a Paul McCartney y George Harrison en Liverpool, Inglaterra. Sin duda es un filme recomendable, especialmente para fans, y aunque se sabe que el objetivo era solamente abarcar esta etapa de John, resultó ser una película corta- dura solamente 98 minutos- y deja con ganas de más, incluso que hubiese una segunda parte en su periodo con los Beatles y hasta su muerte.
La cinta se titula Nowhere Boy como un nombre alterno a la canción "Nowhere Man", escrita por John Lennon para su álbum Rubber Soul de 1965.
Y como la música es una parte vital en el cine, no está de más mencionar las canciones destacadas de John Lennon como solista como "Woman", "Mind Games", "Jealous Guy", "Beautiful Boy (Darling Boy)", "Imagine", "Watching the Wheels" y "Just Like (Starting Over", y las famosas "Give Peace (A Chance)" y "Happy Xmas (War Is Over), la cual vale la pena ponerla en la lista de reproducción de canciones navideñas en esta temporada.
En varios de sus videoclips se puede apreciar su estilo de vida alternativo y su aparición con su amada esposa Yoko Ono y su pequeño hijo Sean.
Pese a que el incomparable e inolvidable John Lennon no está físicamente desde hace 37 años, su música y filosofía permanecerán para siempre.
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